PFILA
a conversaciones, restauraciones, y al clamor por mas de Dios.
Personas que habian conocido a Dios en un nivel superficial toda su
vida finalmente lo conocian en la intimidad de un amor abrumador.
Tuve el privilegio de sumergirme en su realidad. Casi todo el grupo
de j6venes migraron del balc6n a las primeras filas del santuario.
jNo querfamos perdernos de nada!
En aquella atm6sfera, fue facil hacerle promesas a Dios. tOuien
sabe cuantos pactos se habran hecho durante los anos de la adoraci6n
corporativa que siguieron? Se que muchos de los demas j6venes y yo
nos ofrecimos a Dios para lo que Dios quisiera hacer con nuestras
vidas. Invitamos al Espiritu Santo a "derretirme, moldearme,
llenarme, a usarme", para citar uno de los corns populares de la
epoca. No tengo ninguna duda de que el Espiritu de Dios me llen6
durante aquellos dias, y mi experiencia era la de muchos.
Algunas de las evidencias fueron que crecimos en amor y en la
adoraci6n a Jesus con una pasi6n nueva; orabamos juntos todas
las mananas por denuedo para testificar a nuestros companeros
de clase; se activaban los dones espirituales, y j6venes y ancianos
eran empoderados para predicar y enseflar la Biblia, exhortarse
unos a otros a vivir como discipulos fieles e interceder por los
enfermos, muchos de los cuales fueron sanados. Los adolescentes
dirigian la alabanza en el poder de! Espiritu; vimos hijos e hijas
pr6digos regresar a la casa de! Padre. Anhelabamos crecer en gracia,
devorabamos la Biblia, agonizamos en oraci6n por la misi6n de
Dios en todo el mundo. jNo eramos el mismo grupo juvenil!
lC6mo explico aquel tiempo inusual en mi vida? tOue debemos
entender, teol6gicamente, acerca del rol del Espiritu en la vida de
individuos creyentes y en la iglesia?
Estoy agradecida de que el Libro de Disciplina Metodista Libre
ensena con amplitud sobre la persona y obra de! Espiritu Santo.
Da una guia sabia y ofrece un lenguaje para fundamentar nuestra
comprensi6n de las Escrituras, asi como nuestra teologia wesleyana
y la historia Metodista Libre. Una breve busqueda en el Libro de
Disciplina te mostrara abundantes recursos. Aqui tenemos una
muestra:
El Espiritu Santo - Su Persona
'°105 (2.4 en la edici6n mexicana de la Disciplina), El Espiritu Santo
es la tercera persona de la Trinidad. Procediendo del Padre y del
Hijo, el es uno con ellos, la eterna Deidad, igual en divinidad,
majestad y poder. El es Dios actuando en la creaci6n, en la vida
y en la iglesia. La encarnaci6n y ministerio de Jesucristo fueron
consumados por el Espiritu Santo. El continua revelando,
interpretando y glorificando al Hijo.
El Espiritu Santo - Su Obra en la Salvacion
'°106 (2.5) El Espiritu Santo es el administrador de la salvaci6n
planeada por el Padre y provista por la muerte, resurrecci6n y
ascension de! Hijo. El es el agente activo en nuestra convicci6n,
regeneraci6n, santificaci6n y glorificaci6n. El es la esencia
misma de! Senor, siempre presente con nosotros, morando en el
creyente, asegurandolo y capacitandolo.
El Espiritu Santo - Su Relacion con la iglesia
'°107 (2.6) El Espiritu Santo es derramado sobre la Iglesia por el
Padre y el Hijo. El es la vida y el poder testificador de la Iglesia.
El otorga el amor de Dios y hace real la soberania de Jesucristo
en el creyente de modo que sus dones de la palabra y de! servicio
alcancen el bien comun y edifiquen a la Iglesia. En su relaci6n
con el mundo el es el Espiritu de verdad, y su instrumento es la
Palabra de Dios.
Santificacion
'°119 La Santificaci6n es aquella obra salvifica de Dios comenzando
con nueva vida en Cristo por la cual el Espiritu Santo renueva a
Su pueblo conforme a la semejanza de Dios, cambiandolos por
medio de la crisis y el proceso, de un grado de gloria a otro, y
conformandolos a la imagen de Cristo.
Cuando los creyentes se rinden a Dios en fe, y mueren al yo por
medio de la completa consagraci6n, el Espiritu Santo los llena
con amor y los purifica de pecado. Esta relaci6n santificadora
con Dios remedia la mente dividida, redirige el coraz6n hacia
Dios, y empodera a los creyentes para agradar y servir a Dios en
sus vidas diarias.
Asi, Dios libera a Su pueblo para que lo ame con todo su coraz6n,
alma, mente, y fuerza, y ame a su pr6jimo como a si mismo.
Como es claro en estos pasajes, Dios obra en nuestras vidas a
traves de momentos de crisis, que pueden ser "experiencias cimeras"
o tiempos de crisis en el sentido normal de esa palabra-perdida,
tiempos dificiles, dudas-que se han incrustado en un proceso
durante nuestras vidas. Por la gracia de Dios, nosotros crecemos
mas y mas hacia la semejanza de Cristo. Cuando nos rendimos a
la voluntad y prop6sito de Dios una y otra vez, Dios puede usarnos
para llevar a cabo las buenas obras que El prepar6 antes para
que nosotros las hicieramos (Efesios 2:10). Si andamos en la luz,
confesando nuestro pecado cuando lo cometemos, y recibimos el
perd6n de Dios, seguimos experimentando la luz de una conciencia
clara y el gozo de la comuni6n unos con otros (1 Juan 1:7-9).
Algunas ocasiones me pregunto por que no podemos siempre vivir
en el "fuego" de! avivamiento que recuerdo. Recientemente hable del
tema con mi mentor, el Dr. Howard Snyder. Su respuesta fue que la
temperatura normal del cuerpo es de 98.6 grados Fahrenheit. El "pico"
de temperatura'' que se da durante las visitas inusuales de! Espiritu
Santo se supone que no son para la vida normal. No tenemos que
vivir toda nuestra vida a esa temperatura. Pero los pactos hechos
durante esos momentos en que Dios esta "mas cerca que las manos
y los pies" pueden llevarnos. Dios recuerda esos votos y cumple
con Su parte de! pacto, obrando en cualquier circunstancia para
"santificarnos por completo" para Su honra y gloria. La
presencia diaria del Espiritu Santo hace que Jesus sea real para
nosotros, cultiva el amor por Dios y por la gente, y nos
transforma en seguidores de Jesus totalmente dedicados.
tOuiero que la iglesia sea reavivada de Nuevo? jApuesto que si!
Oro para eso. Le pido a Dios un nuevo despertar en nuestra iglesia
y nuestra tierra, para que muchos mas conozcan al Dios verdadero
y vivo. Hasta entonces, todos los dias yo invito al Espiritu Santo a
que Ilene mi vida y me use para Su gloria. Espero que tu lo hagas
tambien . +
Abril 2020 - pg. 6
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