Agosto 2020 — pg. 21
Eres ml
“Yo estaba en Geenville durante el avivamiento de Asbury, y
salpicó a todos los campus de Greenville, impactando las vidas de
todos nosotros”, dijo Saylor. “El Señor me había llamado poderosa
y claramente para ser una misionera en el interior de las ciudades
durante ese tiempo, y yo no sabía lo que eso significaba”.
Su llamado llegó, aunque la frase “ministerio urbano” no era muy
común a principios de los 70. Cuando escribía para el periódico
estudiantil de Greenville, entrevistó a un pastor visitante negro, quien
la motivó a seguir el llamado de Dios para servir a través de las líneas
raciales. Ella trabajó en el Este de St. Louis durante el verano para
adquirir experiencia urbana.
“Yo sabía que tenía que realizar cambios en mi propia vida”, dijo:
“Sabía que tenía que arrepentirme de mis prejuicios. Dije: ´Señor, yo
sé que tengo prejuicios. Crecí en un pueblo en el poniente, de puros
blancos. He escuchado toda clase de comentarios racistas durante
toda mi niñez´”.
Saylor se sintió especialmente cómoda entre blancos e hispanos,
quienes parecían ser atraídos también por ella.
“Salí de Greenville después de graduarme en 1972 y entré
directamente al trabajo, a enseñar y ministrar en Newark, Nueva
Jersey. Estaba en una escuela para puros alumnos negros y participé
con Dwight Gregory en una plantación de la Iglesia Metodista Libre
en ese lugar al mismo tiempo en Passaic”, dijo Saylor.
Luego asistió a la escuela superior en Ohio, en la Universidad de
Akron, y recibió un título en educación con enfoque en el trabajo
como especialista en lectura.
Las Conexiones CUE
Siendo una graduada universitaria, asistió al primer Intercambio
Continental Urbano en 1974 en la Casa Internacional de la Amistad
en Winona Lake, Indiana, donde la denominación tenía sus oficinas
generales en aquel tiempo.
“Básicamente el primer CUE (Encuentro Continental Urbano, por
sus siglas en inglés) era solo un abigarrado conjunto de personas que
realmente se interesaban en la ciudad, o estaban en la ciudad y tenían
experiencia”, dijo: “El Obispo Robert Andrews me había invitado a
asistir porque le había propuesto a la Junta Misionera que yo estaba
pensando en la ciudad de Nueva York como un campo misionero”.
Saylor dijo que la Junta de Obispos tuvo una “muy intensa” reunión
con participantes de CUE quienes entregaron el mensaje: “La gente
de los Estados Unidos estaba en las ciudades, y nosotros como iglesia
debíamos estar en las ciudades para ministrar a las personas que
vivían en ellas, y necesitábamos ser más diversos. Necesitábamos
tener un liderazgo multicultural”.
La primera reunión condujo a la década de involucramiento de
Saylor con CUE, que eventualmente dio como resultado la formación
de la Confraternidad Urbana Metodista Libre. CUE y FMUF
desafiaron el período del tiempo de la preferencia evangélica del
ministerio homogéneo en el que se creía que las personas debían ser
“Yo sabía que tenía
que realizar cambios
en mi propia vida”.
— Donna Saylor
“Estoy tan agradecida
por ella. Cada aspècto
de mi vida fue impactado
positivamente por su
amor”.
— Maritza Leonhard